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Mantener un equilibrio tanto en tu salud como en las situaciones que enfrentas en tu trabajo diario es clave, y para lograrlo, es necesario tomar tiempo para ti mismo. Sin embargo, no siempre resulta fácil tomar esa decisión debido a las múltiples obligaciones que no esperan y el tiempo que no se detiene.
Por esta razón es importante buscar alternativas que contribuyan a tu bienestar y puedan ser incorporadas a tu rutina, pero de manera natural. Un ejemplo de aquello es el uso de la bicicleta.
Contexto de la bicicleta
La bicicleta, ese maravilloso invento atribuido a Karl Freiherr von Drais en 1817, ha ido mejorando su diseño con el paso del tiempo hasta llegar a la versión que conocemos hoy día.
Esta “máquina andante”, como se le conocía en sus inicios, no solo beneficia la salud de las personas, sino también facilita los desplazamientos y cuida del medioambiente.
Beneficios de utilizar bicicleta
Hablando sobre los beneficios de utilizar una bicicleta, vamos a detallarlos uno por uno. ¡Comencemos!
Mejora tu estado de salud
Montar en bicicleta te aleja de la rutina y te permite desconectar del uso excesivo de dispositivos. También se le atribuye la mejora en la oxigenación de tu cerebro, fortalecimiento de tus músculos y también del sistema inmunológico.
Podrás dormir mejor
De acuerdo con ELTIN, montar en bicicleta ayuda a dormir mejor, porque estabiliza el ritmo biológico del cuerpo y disminuye los niveles de cortisol, que se le conoce como la hormona del estrés.
Hace tu desplazamiento más sencillo
Según Statista Consumer Insight, las personas en diferentes partes del mundo han elegido utilizar bicicletas como medio de transporte dos o más veces por semana. Esto se refleja en una encuesta en línea realizada a 10.000 personas entre 18 y 64 años.
Los resultados sitúan a Países Bajos (53%), India (39%) y Brasil (36%) en los tres primeros lugares.
Este modo de transporte reduce el tiempo que te pasas en trancones y es más económico y sostenible.
Cuida el medioambiente
La bicicleta se caracteriza por no generar contaminación acústica, no consume combustible, ni emite gases de efecto invernadero, lo que la sitúa en un lugar importante para cuidar el planeta.
Ya que conoces los beneficios de la bicicleta, también existen algunas recomendaciones para que “ruedes” de manera agradable:
- Utiliza equipo de protección: No olvides llevar un casco, luces y herramientas básicas, en caso de que tu bicicleta necesite ser reparada.
- Respeta las señales de tráfico: Entérate de cuales son y utiliza las señales viales. Sé consciente de los semáforos y conduce con cuidado en el carril adecuado y con suma atención de los peatones.
- No olvides el clima: Nadie está exento que la lluvia aparezca de la nada, o, por el contrario, que el sol nublado se convierta en rayos de sol que afecten tu trayecto. Procura llevar tu impermeable, para el primer caso, y gorra, gafas y bloqueador, para el segundo.
- Mantenimiento periódico: Aunque las bicicletas no requieren tantos gastos como otros medios de transporte, se recomienda realizar un mantenimiento periódico para evitar complicaciones mientras estés rodando.
- Ten precaución con tus rodillas: existen algunas contraindicaciones para personas que puedan tener complicaciones de rodilla. Consulta a tu médico con anterioridad, para que no tengas dificultades que paren definitivamente esta actividad.
Eso es todo por hoy. Y tú, ¿estás listo para pedalear?
Escrito por: Natalia Gutiérrez V.
