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La vida moderna tiene a la humanidad, como nunca antes en la historia, completamente influenciada por la tecnología y sus herramientas pensadas para facilitarnos la vida. En ese sentido, uno de los exponentes más evidentes de esta realidad son las redes sociales.
Día tras días, los seres humanos pasan horas frente a algún dispositivo, usando estas plataformas virtuales con distintos fines. Al respecto de este comportamiento. Ya hemos publicado artículos relacionados, como el de hiperconectividad, en el que te explicamos esta particular manera de relacionarse con múltiples dispositivos simultáneamente.
Volviendo al tema de las redes sociales, si hay un aspecto que distingue a las actuales de las pioneras, es el hecho de que (conscientes de que no haber eso “mató” a las primeras plataformas) están en constante reinvención. Si a los usuarios no los satisface alguna característica de la plataforma, los desarrolladores lo modifican, no se arriesgan a perder usuarios.
Este principio de actualización incesante es lo que nos convoca hoy, ya que se ha dado a conocer que Instagram. Una de las redes sociales más populares del planeta, ha decidido escuchar a sus usuarios y ha tomado la determinación de eliminar uno de esos puntos débiles que tenía en la experiencia del usuario. La imposibilidad de subir fotos o videos desde una computadora de escritorio.
En ese sentido, la compañía ha venido trabajando en una actualización. Según afirman, estará disponible en el corto plazo y permitirá compartir contenido audiovisual desde un ordenador personal. Algo que sólo era posible desde dispositivos móviles hasta este anuncio.
De esta manera, la compañía -que hoy pertenece a Facebook– sigue el camino de sus principales competidores y comienza a erradicar algunas de las características que tanto lo diferenciaban de ellos, en este caso, un cambio muy esperado por los usuarios y que no se entendía bien por qué no se implementó mucho antes.
Escrito por Pablo Ortiz.
