Tiempo de lectura: 4 minutos 📖⏱️
El comportamiento de los seres humanos es muy dinámico. Si bien es verdad que cada persona es un mundo, lo cierto es que hay ciertos patrones de consumo y hábitos que se repiten. Sobre todo en una era tan globalizada, en la que las fronteras entre culturas cada vez son más difusas.
Entre esos hábitos compartidos en todo el planeta, está el modo de emplear la tecnología, en una relación cada vez más grande, en la que los dispositivos están suponiendo un papel más relevante, dando lugar a conceptos como el de hiperconectividad.
Desde la palma de la mano hoy podemos hacer casi todo, desde comprar una entrada de cine hasta sacar una hipoteca. Las horas que pasamos frente a pantallas aumentan constantemente. Indistintamente del motivo para el que se esté utilizando, tal como te describimos en un artículo anterior.
Las marcas han tomado nota de esta actualidad que vivimos y, lógicamente, han volcado mucho de su presupuesto publicitario, al canal tecnológico, llegando directamente al usuario que buscan y aprovechando el potencial de un campo que no para de crecer, de la mano de una digitalización que va en aumento.
La publicidad digital tiene varias ventajas siendo la más llamativa para las marcas el hecho de que ofrece segmentar el público de manera altamente efectiva. Además trae reportes estadísticos certeros sobre el impacto de las campañas, con métricas en tiempo real.
Según un reporte de emarketer, la inversión en publicidad digital representa casi el 60% del total del rubro a nivel mundial, lo que habla a las claras de que ya se lleva la mayoría del presupuesto publicitario de las empresas. Esto, más allá de ser llamativo, no deja de ser esperable. Incluso se da por descontado que seguirá siendo una diferencia más marcada en el futuro.
Asimismo, para complementar la información, podemos citar el reporte digital de Data Reportal, que afirma que, mundialmente, se invierten más de 378 mil millones de dólares en publicidad digital, una cifra que creció 12,7% entre 2019 y 2020. Según especifica el informe, esta cifra representa un 58,2% de la inversión publicitaria mundial.
Son muchos los aspectos de nuestras vidas que cambiaron con los avances tecnológicos. El rubro de la publicidad no es ajeno a ello, dejando ver el impacto que la modernidad ha tenido en sus prácticas. Y siendo un claro ejemplo de la necesidad de evolucionar y reinventarse para seguir en el mercado.
Escrito por Pablo Ortiz.
